Discriminación, parte de una problemática estructural y cultural mayor

6 de Marzo de 2025

Discriminación, parte de una problemática estructural y cultural mayor


• Diego Prado Tuma, doctorando en Investigación Educativa de la UV, analizó cuatro formas en las que se trata la discriminación desde los trabajos de la sociología y la antropología

• Ofreció una conferencia, invitado por el Instituto de Antropología de esta casa de estudios, a través de la Comisión de Ética

04/03/2025, Xalapa, Ver.

Diego Prado Tuma, estudiante del Doctorado en Investigación Educativa de la Universidad Veracruzana (UV), afirmó que un acto de discriminación no solo se da a nivel personal, sino que es parte de una problemática estructural y cultural mayor.

Su planteamiento se deriva del trabajo de investigación que realiza dentro del posgrado, en el que presenta un minucioso catálogo de las formas de discriminación en donde los apodos entre las niñas y los niños están asociados en primera instancia a describir el tono de piel, el color negro es la principal fuente de producción de esas expresiones verbales, seguidos a los asociados a la pertenencia étnica.

Invitado por el Instituto de Antropología de esta casa de estudios, a través de la Comisión de Ética, en el marco del Día Internacional de la Cero Discriminación, celebrado el 1 de marzo, Prado Tuma ofreció una conferencia virtual y explicó que en México la discriminación social forma parte del pensamiento dominante en la sociedad y es estructural.

Dijo que durante generaciones se ha conformado un pensamiento para el que la percepción de los miembros de los pueblos indígenas, como miembros de “grupos” del más bajo estatus social, político, económico y cultural, es considerado normal.

“El problema es complejo y hace necesario ampliar su visibilización, ya que se naturaliza y la discriminación se llega a catalogar como normal”, subrayó.

Desde esta perspectiva, dio a conocer que dentro del posgrado desarrolla un trabajo de investigación en el que presenta un minucioso catálogo de las formas de discriminación en donde los apodos entre las niñas y los niños están asociados en primera instancia a describir el tono de piel, el color negro es la principal fuente de producción de esas expresiones verbales, seguidos a los asociados a la pertenencia étnica.

En la ponencia se refirió a las cuatro formas en las que se trata la discriminación desde los trabajos de la sociología y la antropología: macrosocial, institucional, relacional y clima escolar; asimismo, hizo un análisis de las distintas mediaciones que cada estudio identifica para explicar cómo se relaciona un contexto general a un acto de discriminación particular, y cómo se entiende la discriminación desde cada una de estas perspectivas.

Comentó que son múltiples las maneras en las que los órdenes simbólicos diferenciados en términos estructurales se expresan en tratos excluyentes o discriminatorios entre estudiantes; precisó que los racismos funcionan en la configuración de grupos de amistades entre los alumnos y alumnas.

Diego Prado citó uno de los discursos macrosociales de Bolívar Vinicio Echeverría Andrade, quien expresó: “En México nos encontramos ante un racismo identitario civilizatorio, que además de aspirar a una blancura inscrita en el color de piel busca desesperadamente una blanquitud civilizatoria, entendida como el conjunto de rasgos que acercan a los individuos y a las poblaciones con el ideal civilizatorio occidental”.

Se refirió a otro estudio, el cual expone un amplio conjunto de datos empíricos que permiten argumentar que las dinámicas sistémicas contribuyen a reproducir las desigualdades sociales.

La conferencia virtual fue seguida por docentes, investigadores y estudiantes de Antropología.