El documental In Calli Ixcahuicopa da cuenta de los inicios de la UAM

29 de Agosto de 2024

El documental In Calli Ixcahuicopa da cuenta de los inicios de la UAM


26 de agosto de 2024

• El cortometraje se presentó este 26 de agosto en la Cineteca Nacional como parte de los festejos del 50 aniversario de la UAM

• Es un trabajo que esperó casi 50 años para su estreno, afirmó su director Miguel Grunstein

Clara Grande Paz

A casi cinco décadas de su creación, el cortometraje documental In Calli Ixcahuicopa / Casa abierta al tiempo vio por primera vez la luz este 26 de agosto en una proyección especial en la Cineteca Nacional para dar cuenta de la enriquecedora historia, orígenes e incidencia social de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM).

“Es un trabajo que esperó casi 50 años para su estreno y una especie de cápsula del tiempo que nos da la posibilidad de ver dónde estaba la UAM en sus orígenes y cómo se encuentra en el presente”, afirmó su director Miguel Grunstein.

El realizador, editor y fotógrafo de este material audiovisual histórico que destaca la visión y el esfuerzo de sus fundadores por crear una universidad que no sólo impartiera educación de calidad, sino que también tuviera un fuerte compromiso con la sociedad, recordó aquellas palabras del rector fundador de la Casa abierta al tiempo, el arquitecto Pedro Ramírez Vázquez, después de ser contratado por la Rectoría General para establecer una pequeña productora documental.

“Bienvenido a bordo, me dijo y fue algo muy especial por el tipo de proyecto porque siempre he sido partidario de la academia y porque en ese momento me sentía parte del proceso universitario por dos razones: acababa de terminar una maestría en Cine y Televisión en Estados Unidos y estaba viendo el crecimiento y desarrollo de una nueva institución educativa”.

En entrevista desde Santa Fe, Nuevo México, explicó que el documental se integra por los testimonios de autoridades, acompañados de imágenes entrelazadas que ofrecen un mosaico de expresiones y de manifestaciones de comportamientos escolares universitarios, la docencia, la investigación y también lo que se iba descubriendo en las visitas por las sedes fundadoras de Azcapotzalco, Iztapalapa y Xochimilco.

“La búsqueda fue más bien intuitiva y había viajes de exploración a las Unidades, que es la parte más linda del cine documental; fue un reto buscar y encontrar esas imágenes y hacernos tan transparentes como podíamos, pero también manifestar el hecho de que también formábamos parte, lo cual nos ayudó mucho en la selección”.

Grunstein declaró que el resultado es una variedad de actitudes desde gestos sonrientes, miradas escépticas, gente disfrutando de actividades culturales o trabajando muy duro en las aulas, capturadas de manera natural y sin poses ante la cámara.

“Se puede ver el inicio de registro de las y los estudiantes, tomas muy tempranas de la construcción de los edificios y rasgos arquitectónicos muy interesantes que a mí me fascinaron y dan cuenta de lo que es ahora la Institución, como un organismo verdaderamente creciente”, apuntó.

“Algo que me gustó mucho es que se formó una comunidad de producción operando dentro de un espacio que también estaba creciendo, en desenvolvimiento y evolución; el concepto del documental fue desarrollándose a partir de las declaraciones de académicos y administrativos de alto rango que nos ayudaron a plasmar cuáles fueron los objetivos, los retos y los compromisos de la Universidad”, resaltó.

“Empecé a filmar con mi propia cámara porque aún no teníamos el equipo solicitado, pero gracias a la generosidad y la visión de la Rectoría pudo contarse más adelante con muy buenos equipos desde Los Ángeles para poder producirlo”.

Sobre el trabajo de edición, señaló que tenía alrededor de 30 horas de material registrado a lo largo de casi un año desde el inicio de actividades en 1974, donde es la voz del propio arquitecto Ramírez Vázquez, la que da la pauta en la serie de testimonios posteriores del cortometraje de poco más de 20 minutos de duración.

De acuerdo con el cineasta, al terminar la gestión del rector fundador, su labor concluyó y la copia terminada se quedó resguardada en la Rectoría General, sin que se supiera cuál fue su uso o destino.

Es ahora que con el apoyo del licenciado Víctor Manuel López Menacho, académico del Departamento de Educación y Comunicación de la Unidad Xochimilco y quien en su momento fue uno de los asistentes del realizador, que el documental pudo ser rescatado y rehabilitado junto con la labor de Grunstein.

“Ya no es un rollo de película que está raspado o roto, sino que está rescatado; representa una semilla, es el origen y de ahí su valor, porque nunca me imaginé que se volvería a ver”.

Para su proyección en pantalla grande como parte de los festejos del 50 aniversario de la UAM, el cortometraje documental tuvo algunas adecuaciones técnicas, además de la incorporación de cintillos con los nombres de las autoridades que aparecen en las imágenes.

“Le veo un potencial muy interesante porque una vez que tiene uno varios puntos, se puede ir definiendo una línea o un trayecto; toda casa de estudios va cambiando de administración, de docentes, alumnos, así es su naturaleza”, indicó.

“Percibo a la UAM como una institución viva y en expansión, así lo demuestra con las más recientes Unidades de Lerma y Cuajimalpa, lo cual es valioso porque empieza a balancear más su distribución geográfica lo que puede ser importante para el desarrollo urbano y de oportunidades que le ofrece al estudiantado”.